La vida es demasiado corta para trabajar con malos clientes… Me tomó tiempo (=DINERO), estrés, dolores de cabeza y malos ratos entenderlo.
No todos los clientes son iguales. Los buenos clientes mejorarán tus habilidades y tu reputación. Los malos clientes pueden poner en duda y en riesgo tus habilidades, jo&3* tu reputación, y terminará siendo el peor dinero que jamás hayas hecho.
En primer lugar, no podemos aceptar el mito de que trabajar con clientes malos es “parte de …” , “que el cliente siempre tiene la razón” (BS)
Es verdad; una que otra vez, vas a tener que trabajar con alguien que no te guste, pero en la “descripción de trabajo” no dice que tienes que trabajar con gente que no te respeta, ni a tu tiempo, ni a tu trabajo.
Una vez entiendas cómo un mal cliente puede destruir tu carrera, vas a ser mejor detectándolos y evitándolos. Y será el MEJOR dinero que nunca hiciste.
Pero; Gianna “Dinero Es Dinero, ¿Verdad?”
¡Nop!.
Los malos clientes tienen una habilidad tan grande de hacernos perder el tiempo y la energía que no hay dinero, ni factura que pague por eso. Los mas seguro no puedes cobrarle adicional a un cliente una reunión extra en la noche o en el fin de semana. Definitivamente no puedes cobrar adicional a un cliente por que tenga problemas de actitud.
Y si se pudiera facturar por cuestiones o problemas de horarios, mala coordinación o cambios a última hora, no vas a poder facturar por el estrés que te cause eso. No se puede facturar por aguantarle idioteces a nadie, ni mucho menos por aguantarle sus gritos. No se puede facturar por no dormir bien. En fin si cobráramos por todo lo que tenemos que hacer más allá de “para lo que nos contratan” fuéramos millonarios.
Los Malos Clientes Pueden Espantar A Los Buenos Clientes
Los Clientes malos son como un virus que se riega a lo largo de tu carrera.
Los Clientes malos pueden espantar a los buenos clientes por dos razones:
- Los Clientes malos tienen una forma brutal de chuparnos más tiempo de lo que deberían. De quitarnos energía. Eso significa que probablemente no aceptas o no atiendes bien a los buenos clientes por que estás demasiado ocupado bregando con los problemas de ese mal cliente. Cada vez que estés trabajando con un mal cliente es tiempo que NO le dedicas a un cliente que le encantaría la oportunidad de trabajar contigo y que te respeta. Es difícil de aceptarlo, pero sé que lo he hecho. Ya no hay tiempo para trabajar con malos clientes.
- La carga y el cansancio mental que nos causan es más grande de lo que creemos. Cuando estas bregando con un mal cliente, puede que veas a un buen cliente como malo. Los clientes malos nos drenan, nos nublan la mente y puede que afecte la evaluación de los otros clientes.
Pero Se Va Poniendo Peor La Cosa
Volvamos a la metáfora de virus. ¿Cuándo fue la última vez que te enfermaste y como acto de magia te despertaste sintiéndote mejor al otro día? Es bastante raro. Lo mismo pasa con los malos clientes. Normalmente, se ponen peores antes de mejorar. Y cuando digo mejorar, quiero decir que terminas el trabajo / proyecto con él, o cuando sales de él.
Las Señales De “Sal Corriendo”:
Ahora que entiendes que todo el dinero no está creado ni ganado igual, puedes mejorar tus habilidades para evitar estos malos clientes. En los últimos siete años he trabajado con todo tipo de clientes (buenos, malos, regulares) y en los últimos tres años he aprendido a evaluar a mis clientes potenciales. Sin dudas, lo más importante que he aprendido es a confiar en mi instinto. Gracias a Dios tengo un instinto que muy pocas veces me falla.
Tienes que conocer tu límites y conocer que estas dispuesto a aguantar.
Ya sea en la aplicación, en el cuestionario, en la primera reunión, en la segunda reunión, o antes de empezar a trabajar, mi instinto casi siempre me dice “la que hay”. Yo luchaba contra eso y me presionaba a coger cuanto trabajo y proyecto me ofrecían. Nunca tenía un “No”. Pero Ya no. Si mi instinto me dice que no, entonces yo digo que no. Y funcionando de esa forma he visto la diferencia y he tenido mas paz en mi vida.
Si no estás dispuesto a vivir y morir por tu instinto, aquí algunas otras señales de advertencia en el camino:
- Las llamadas CONSTANTES a última hora. (Seguramente se cansó de buscar cosas gratis o más baratas que “tú”, entonces no tiene más remedio que recurrir a tí. Y menciono CONSTANTES por que una que otra vez puede ser “normal” que se presente algo a última hora, pero que te llamen casi todo el tiempo a última hora, no es casualidad).
- No sabe quién eres cuando lo llamas para atrás porque llamaron dieciséis opciones más.
- Deja un mensaje sin detalles específicos, “que es un gran proyecto” y que necesitas devolver la llamada “rápido”.
- Hace una cita, o te contrata y no llega o cancela constantemente.
- Te dice como tienes que hacer TÚ trabajo y como funciona TÚ trabajo. Se acostumbran a micro manejar. (Hello! ¿Para que te contrata entonces?)
- Trata de negociar en tus precios o explica por qué eres “demasiado caro” ( A los buenos clientes no les gustan las cosas baratas ni gratis; una de dos: o no quiere pagar, o no puede pagar) (Consejo: Nunca seas el “Walmart” de tus clientes )
- Explica que antes contrataban a otra persona, pero quieren darte una “oportunidad” a tí.
Eso no es una lista exacta. Pero son sólo algunas alertas rojas que me he encontrado. Aprende a confiar en tu instinto y si todas las alertas son rojas, no trates de convencerte de que es un “buen cliente” SAL DE ÉL, refiérelo a otra persona o como dice mi amiga; “Envíaselo a la competencia”.
Hay buenos clientes por ahí. Hay personas que respetarán, valorarán y pagarán bien por lo que ofreces.
Pero tenemos que entrenar a nuestros clientes, enseñarles cómo nos deben de tratar y posicionarnos correctamente en nuestra industria.
Si dejas que tus clientes te pisoteen, lo harán. Si le dejas saber a tus clientes que no te importa como te traten, y que aceptas no ser respetado, será más difícil encontrar esos buenos clientes. Los buenos clientes no están buscando trabajar con personas que aceptan “cualquier cosa”; están buscando trabajar con personas que tengan sus normas y expectativas tan altas, o mayor, que las de ellos; buscan calidad.
Tienes que establecer tus reglas, tus límites y dar a respetar tu trabajo desde el principio.
Conoce tus límites y comunícalos claramente. Si un cliente no puede respetar tus límites, ¡Sal de él! para que puedas enfocar tu energía en tus buenos clientes.
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Ahora cuéntame; ¿Has tratado con “malos clientes”? ¿Quieres salir de él? ¿Cuál es tu plan para hacerlo?
